Pómulos
El tratamiento con ácido hialurónico en los pómulos es una técnica de relleno dérmico utilizada para restaurar el volumen perdido, realzar la estructura facial y proporcionar un aspecto más juvenil.
Este procedimiento es muy popular debido a su capacidad para ofrecer resultados naturales y duraderos con un riesgo mínimo y sin necesidad de cirugía.

¿Qué técnica se utiliza?
Se realiza mediante técnicas de inyección específicas para garantizar resultados seguros y efectivos:
En primer lugar, el Dr. Marc Illa evaluará la estructura facial del paciente, discutirá sus expectativas y diseñará un plan de tratamiento personalizado.
Se seleccionará el tipo de ácido hialurónico más adecuado, considerando factores como la densidad y la cohesividad del gel.
Marcas como Juvéderm Voluma, Restylane Lyft y Teosyal Ultra Deep son comúnmente utilizadas para el relleno de pómulos.
A/D Caso 1



¿Cómo es el procedimiento?
¿Quieres restaurar el volumen de tus pómulos?
Ventajas del tratamiento
Resultados esperados
El objetivo del tratamiento con ácido hialurónico en los pómulos es lograr una mejora sutil y natural que realce la estructura facial sin dar una apariencia artificial.
- Inmediatos
Los resultados suelen ser visibles inmediatamente después del tratamiento, aunque la hinchazón inicial puede hacer que el área tratada parezca más voluminosa de lo esperado.
- A corto plazo
A medida que la hinchazón disminuye (generalmente en unos pocos días), los pómulos adquieren una apariencia más natural y equilibrada.
- A largo plazo
Los resultados pueden durar entre 9 y 18 meses, dependiendo del tipo de ácido hialurónico utilizado, el metabolismo del paciente y el área tratada. Se pueden programar tratamientos de mantenimiento para prolongar los efectos.
¿Quieres conseguir un aspecto más juvenil?
¿Es posible combinar la medicina estética con la cirugía facial ?
Se pueden conseguir grandes resultados con pequeños detalles como los que aporta la medicina estética. La clave está en aplicarlos en las cantidades y localizaciones adecuados, y esto sólo se consigue si se realiza un diagnóstico inicial correcto.
Siempre realizaremos una valoración integral de la estética facial, se podrá optar por tres caminos:
Con la cirugía estética podemos
Reposicionar los tejidos que se han caído
Recuperar los tejidos que se han atrofiado con el paso de los años.
Con la medicina estética podemos
Corregir pequeñas asimetrías con elevado grado de detalle que no conseguimos con la cirugía.
Corregir las arrugas dinámicas con toxina botulínica.
Aumentar el brillo de la piel con hidratación y nutrición gracias al ácido hialurónico.